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Eterno retorno


Son casi las ocho de la tarde. Es noche cerrada en la ciudad. El frío invernal hace que la gente vista ropas de graves colores y tupida textura. Las luces de las metálicas farolas emiten una luz artificial que mancha el suelo de un amarillo macilento. Las gentes andan presurosas por la acera. Parece que tienen prisa. Prisa por llegar a sus casas. El día se acaba. Una sensación de finitud invade las calles de la ciudad. Los comercios, uno tras otro, echan sus cierres con un acerado estruendo. Las cajas de cartón se amontonan en las aceras. No se oye hablar a nadie, sólo un murmullo cansino y apagado de despedidas y “hastamañanas” se adivina en el ambiente. La gente va a lo suyo y, cabizbajos, dirigen su pensamiento hacia el calor del hogar que les espera a la vuelta de la esquina.
Volver a casa, esa es la esperanza y el mayor deseo de cada uno de los trabajadores. Estar en su dominio, en su territorio, como animales territoriales que somos, es la máxima dominante a estas crepusculares horas.
Los escaparates han perdido su luminosidad. Se han apagado sus luces y se quedan solos con la noche.
Cada vez que me sorprende el término de una jornada por la calle, pienso indefectiblemente en la fugacidad de la vida y en ese eterno retorno al que aludía el filósofo. Mañana será otro día. Otra vez la alegría de un nuevo despertar inundará las calles ahora tristes y apagadas. Y otra vez la vida recobrará su sentido. Las gentes transitarán sin prisa y con sosiego por delante de los claros escaparates repletos de relucientes objetos que despiertan anhelos entre los paseantes. Y el sol aparecerá por detrás del tejado de un alto edificio indicando con su luz que un nuevo día acaba de nacer.

27 comentaris:

La Vero ha dit...

La rutina, eso que siempre queremos avandonar en favor d eunas vacaciones, pero que después durante estas, la gente hecha de menos esas costumbres diarias.

Saludos!!!!

Marta ha dit...

Tu has visto "el día de la marmota"? Pues eso.

Pero que aburrimiento no?

besitos papi.

Toni Solano ha dit...

También yo veo a esa gente tranquila, apurando los días, repitiendo los ciclos interminablemente, apurando los días, repitiendo los ciclos interminablemente, apurando...

Anònim ha dit...

será la famosa rutina, no??????
creo que no hace falta esperar las vacaciones, para ayudar a salir de ella.
agregando o quitando algo todos los días, podemos favorecer al cambio!!!!!!!!!
me parece que no es bueno hacer de nuestra vida, algo rutinario.
es mi parecer, claro, con humildad

un fuerte abrazo, amigo y buen finde

Lauryna ha dit...

A mi me encanta la rutina... se que suena estraño, pero me gustaria conseguir en mi joven vida, un trabajo rutinario, una vida estable sin altos ni bajos, que respire esa tranquilidad de la que hablas cuando las calles quedan vacias, ... para mi la rutina es tranquilidad, es saber mas o menos lo que tienes que hacer, aunque dentro de esa rutina siemre puedes improvisar un poco.
Mira hoy el sobre de descafeinado que abri, traia un mensaje (que todas las mañanas me hace pensar) ponia: Los mejores planes son los que improvisamos.
Una rutina con una pizca de imaginacion, ganas de vivir, y algo improvisado, todo en su justa medida, no estaria mal.

Un besito, disfruta del findesemana

Miguel ha dit...

La Vero: Quizás eso de no tener que pensar qué tenemos que hacer sea más valioso de lo que a veces pensamos.

Marta: Sí que he visto esta película, pero la rutina te da sorpresas... y esto es emocionante. ¿no, pequeñita marmota?

Antonio: Repitiendo, repitiendo y volviendo a ser... hasta que la cadena se rompe...

Adrisol: Yo, es que no creo que la rutina sea como apuntaba Marta cada día un calco del día anterior, hay, eso sí, unos mismos planteamientos, pero no siempre unas mismas soluciones.

Lauryna: Te doy toda la razón. La rutina está para romperla e improvisar cuando estamos inspirados, y si no, la rutina que hemos elegido nos lleva tranquilamente a vivir.

Joselu ha dit...

Hace muchos años viajaba durante varios meses cambiando cada día de lugar y alojamiento. Me gustaba el viaje como forma de estar en el mundo. Y me sigue gustando ese cambio infinito de formas y lugares tan alejado de la costumbre, aunque también en el cambio continuo puede encontrarse la rutina. En el fondo somos seres rutinarios y previsibles. Eso es lo que facilita la vida.

Arwen ha dit...

Que hermosa entrada describiendo el atardecer y el amanecer...a mi la verdad no me gusta la rutina y deberiamos intentar no caer en ella...te deseo un feliz sabado...besitossss

Sarashina ha dit...

A mí también me gusta que la vida se desenvuelva con esa rutina de los días y de las noches, de la luz y de la oscuridad, y lo disfruto mucho, eso es cierto, como a pesar de todo se disfruta con la alternancia de alegria y melancolía, de buen ánimo y decaimiento, porque una cosa va con la otra. ¿Será la misma relación que existe entre la vida y la muerte?

soy amarillo y azul ha dit...

...como el movimiento de un péndulo...

Miguel ha dit...

Joselu: Totalmente de acuerdo contigo. Al final hasta el cambio se hace rutinario.

Arwen: Por mucho que intentemos huir de la rutina, estamos atrapados en una serie de usos y acciones que nos convierten en seres rutinarios (aunque a veces, sea a la fuerza)

Clares: Los contrastes son vida. Y saber que después del día viene la noche y que siempre hay un amanecer nos da fuerzas para seguir viviendo.

Miguel ha dit...

Un profe cualquiera: Tal vez la vida tenga este movimiento pendular que permite que nunca estemos fijos en un sitio, que todo va y viene.

Anònim ha dit...

La rutina tiene partes buenas, no siempre es negativa. El descontrol tampoco es positivo. Un abrazo.

Miguel ha dit...

Fernando: Yo, entre rutina y descontrol, prefiero la rutina.

Un par de neuronas... ha dit...

Es extraño cómo se ven las cosas cuando vives en la ciudad. Nosotros que estamos en un pueblo de las montañas, donde la circulación de viandantes se resume a una avalancha por las noches de: un perro y dos batas hasta los pies de colores pastel sacando la basura... El paisaje que nos presentas es idílico a rematar. Hace años que no lo vemos y, parece mentira, lo que se echa en falta.

Gracias por ese retrato repleto de melancolía...

Perséfone ha dit...

Para mía l rutina no sólo es buena, sino que también es necesaria. Estoy segura de que es la que en muchas ocasiones nos hace valorar las pequeñas cosas y esos detalles aparentemente insignificantes que en realidad son los que importany los que hacen que un día sea distinto tanto del que le precede como del que le sigue.

¿o no? jeje

Un abrazo.

Miguel ha dit...

Verónica Marsá: La verdad es que es distinto el trasiego de una ciudad a la tranquilidad de un pueblo, pero todo tiene su encanto.

Miguel ha dit...

Perséfone: Toda la rutina está llena de engranjes y si falta alguno, la rutina se viene abajo. Pero también es cierto que los engranajes, a veces, varían, y esto hace que no todos los días sean iguales.

MRB ha dit...

"...Y otra vez la vida recobrará su sentido" Hermosa frase.

Un gusto leerte.

Shanty

Miguel ha dit...

Shanty: La vida recobra el sentido cuando se acaba un ciclo. Cada día que muere tiene su complemento con el amanecer, y la vida continua.

Anònim ha dit...

pienso igual que tú, prefiero rutina a descontrol. Un abrazo.

Marinel ha dit...

Qué curioso es esto de los blogs...temas parecidos que se nos cuelan por las rendijas del alma hasta traspasarla, y hacernos escribir plasmando sensaciones que nos invaden...
Has descrito de manera armoniosa esa hora que se adentra en la oscuridad nocturna.Esa; en la que el ajetreo no es otro,que el final laboral de manera ansiosa por regresar al nido.
Precioso,como siempre.
Besos.

Hada Isol ♥ ha dit...

A la rutina nosostros la tildamos de aburrida,pero cuando llega nuestro ocaso extrañamos el levantarnos cada mañana a recorrer el mismo camino que lleva al odiado trabajo,para encontrarnos con esas personas que nos ha puesto la vida,la rutina es el hilo de nuestra vida,el camino trazado día a día pero es un camino que admite de vez en cuando algun zig zag,un detenerse o correr! la diferencia la hacemos nosotros.
He disfrutado mucho al leerte,el tema que panteas es muy interesante y tu lenguaje para hacerlo es exquisito,muy rico,adoro leerte,siempre es una muy buena lectura.Abrazos!

Miguel ha dit...

Marinel: es el final de un día, pero a la vez, es el cominezo de otra cosa.

Hada Isol: La rutina es algo que nos da seguridad y que, como la tenemos ahí, queramos o no, hay que aprender a quererla.

Esther ha dit...

Por suerte, a veces, cuando los escaparates duermen plácidamente, la luna enfoca alguna que otra risa callejera, o algún llanto que podemos aliviar, o alguna estrella que diga :
¡La rutina es totalmente imprecisa!

Miguel ha dit...

Esther: ¡qué bonito comentario! es cierto, la rutina es totalemtne imprecisa.

Anònim ha dit...

un abrazo y feliz semana

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